GARCIDEN trabaja con un fuerte compromiso medioambiental para garantizar el futuro

La pesca sostenible es una necesidad del presente más inmediato para garantizar el futuro de la fauna marina. No se trata exclusivamente de asegurar la supervivencia de las especies, sino de los numerosos empleos que dependen del sector. Comercializar pescado y marisco de calidad es compatible con respetar los ecosistemas marinos, una de las principales fuentes de riqueza para la alimentación saludable.

GARCIDEN trabaja con un importante compromiso medioambiental que fomenta la sostenibilidad de la actividad pesquera y la conservación de la vida en el fondo marino. Consciente de que esa responsabilidad es vital para mantener el pescado como sustento de una dieta equilibrada, la marca AD Pescado y Marisco basa su amplio catálogo de productos en la protección del hábitat natural.

En este sentido, una clave fundamental para realizar una pesca sostenible es que la materia prima tenga su origen en la pesca artesanal, lo cual favorece que el impacto sea mínimo. Esa es la política de abastecimiento que GARCIDEN lleva a cabo, garantizando en todo momento que la captura se desarrolle sin comprometer la continuidad de las especies.

Este método de trabajo permite que, además de aprovechar al máximo el pescado y mejorar la optimización de los recursos naturales, se eliminen los descartes y a la vez se regeneren las especies en los caladeros. Cuidar la fauna marina es, en definitiva, defender el presente y el futuro del mar.

La sostenibilidad es un valor añadido que se suma a los innumerables beneficios que aporta el pescado a la salud, pero lo cierto es que solo con un compromiso sólido con el medio ambiente se puede mantener el abastecimiento del mercado. Ese el principal objetivo con el que opera GARCIDEN en AD Pescado y Marisco: sin respeto al entorno no existe una pesca responsable desde el punto de vista social.

La excelencia se puede alcanzar conservando el entorno y ofreciendo género de primera calidad, una premisa innegociable porque sin pesca sostenible no hay futuro en el mar. Ganamos todos: especies marinas, consumidores y empresas.